Vueltas y vueltas: por qué escribir poesía para niños

Alejandra Quiroz Hernández – 21 de mayo de 2024

Escribir y leer poesía para niños es una actividad enriquecedora tanto para los pequeños como para los adultos. La poesía, con su ritmo, rima y uso creativo del lenguaje, captura la imaginación de los niños, invitándolos a explorar mundos nuevos y emocionantes. A través de la poesía, los niños aprenden a apreciar la belleza del lenguaje y a expresar sus propios pensamientos y sentimientos de manera única y creativa. Además, la poesía fomenta el desarrollo de habilidades lingüísticas y cognitivas, como el vocabulario, la comprensión lectora y la capacidad para pensar de manera crítica y creativa.

Leer poesía a los niños desde una edad temprana también les ayuda a desarrollar una sensibilidad hacia el ritmo y la musicalidad del lenguaje. Esta exposición temprana no solo mejora su capacidad de escucha y concentración, sino que también les enseña sobre la estructura y forma de las palabras de una manera divertida y accesible. La poesía para niños a menudo está llena de metáforas y simbolismos, lo que les permite desarrollar habilidades para interpretar y apreciar diferentes niveles de significado dentro del texto.

Por otro lado, el acto de escribir poesía permite a los niños expresarse y comunicar sus ideas, emociones y experiencias de una forma profundamente personal y creativa. Este proceso creativo puede ser tremendamente gratificante y terapéutico, ayudándoles a entender y manejar sus emociones. Además, escribir poesía les brinda la oportunidad de experimentar con el lenguaje, jugar con las palabras y descubrir su propia voz única como escritores. En conclusión, leer y escribir poesía para niños no solo es una forma de entretenimiento, sino una herramienta educativa y de desarrollo personal invaluable.